En 1994 Telmo abandona temporalmente Remelluri, que ha vuelto a dirigir hace unos años, para dedicarse a formar, junto con Pablo Eguzkiza, la Compañía de Vinos Telmo Rodríguez, que nace con la vocación de recuperar paisajes y viñedos abandonados pero de gran calidad.
En el año 2000 Telmo, Maribé y Paco, buenos amigos desde hace años, juntan sus caminos comerciales y crean Alma Vinos Únicos. Su objetivo es distribuir en España vinos de especial calidad y personalidad. Bodegas que tengan personas, “alma”, detrás. Se busca trabajar con aquellos bodegueros que sean capaces de expresar la naturaleza de su terroir y crear un vino único y personal, que trasmita pasión.