Ladeiras do Xil

Telmo Rodriguez y Pablo Eguzkiza visitaron por primera vez la región de Valdeorras en 2002. Poco después empezaron a trabajar con viticultores locales y hoy en día trabajan 23 hectáreas de viñedo en las dramáticas laderas que componen el paisaje de esta zona de Valdeorras, en los bancales del rio Bibei.

A lo largo de los años a medida que iban conociendo el lugar fueron acumulando pequeñas parcelas, viñedos excepcionales donde se encuentran co-plantadas variedades como mencia, merenzao, sousón, brancellao godello o palomino. Aunque no existiera una clasificación definida en la región los viticultores locales, a base de experiencia, ubicaban perfectamente donde se vendimiaban las uvas que daban los mejores vinos y así poco a poco se fue creando una  clasificación  que solo existía en el imaginario popular y que solo se conocía en aquellas remotas aldeas. Poco a poco, Telmo y Pablo han ido recuperando algunas de estas parcelas embotellando su singularidad. 


La mayoría de los suelos en Valdeorras son pobres de origen granítico con poca cubierta orgánica aunque también cuentan con viñedos plantados en zonas más arcillosas. Aquí, Telmo y Pablo apuestan por mantener los viñedos como se han plantado tradicionalmente. Creen que para expresar la complejidad de esta antigua región es necesario la co-plantación ya que tradicionalmente estás pequeñas parcelas siempre han sido plantadas de esta manera. Todos los viñedos se trabajan en ecológico. En la elaboración, la premisa es mantener el carácter del viñedo por tanto se fermenta con levaduras autóctonas en depósitos de acero inoxidable para luego pasar por crianzas en fudres y barricas usados de gran capacidad. Los vinos son sutiles y elegantes pero también encierran algo misterioso y salvaje que recuerda a los sobrecogedores y ahondados paisajes de Valdeorras. 

País
España
Región
Galicia
Denominación de Origen
Valdeorras
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