Las Recomendaciones del Mes: Noviembre, un Beaujolais más allá del Beaujolais Noveau

Las Recomendaciones del Mes: Noviembre, un Beaujolais más allá del Beaujolais Noveau

El tercer jueves de noviembre de cada año, un estilo de vino llamado Beaujolais Nouveau aparece en los estantes de las vinotecas de todo el mundo. Este hecho marca el Beaujolais Nouveau Day, una celebración del vino, su liberación, y su región. Los minoristas y enólogos no están autorizados a vender la vendimia Beaujolais Nouveau del año hasta ese día. Por ello, en honor a esta famosa celebración, las recomendaciones de este mes serán vinos que, aunque no son Beaujolais Noveau, proceden de esta región.

Domaine Jules Desjourneys, Chenas Le Jugement Dernier

Fabien Duperray es un conocido agente de vinos que controla cupos de bodegas punteras como Arnaud Ente y Coche-Dury. Ahora su nombre está unido también a los grandes productores de Beaujolais. En 2007 le ofrecieron una impresionante y parcela de viñas viejas en Fleurie, a la que no pudo resistirse, en ella elaboró sus primeros vinos, que aún no han salido al mercado. Fabien quiere revertir la idea de que el atractivo de los vinos de Beaujolais está en su inmediatez. El nombre Jules hace referencia al celebre enólogo y científico de Beaujolais Jules Chauves, Desjourneys, lo agregó por que le pareció que combinaban bien.

Desde 2014 también trabaja 10 ha de viñedo en Mâcon en colaboración con Domaine Thibert. En Beaujolais, elabora vinos en Chénas, Morgon, Fleurie y Moulin-à-Vent. Allí cuenta con parcelas en los lieu-dit Les Moriers y Chapelle du Bois en Fleurie, Chassignol y Michelon en Moulin-à-Vent y Corcelettes en Morgon. Todo el viñedo se trabaja siguiendo los principios de la biodinámica. Los rendimientos son minúsculos, muchos de los viñedos tienen más de 80 años por lo que los rendimientos son naturalmente bajos, pero en algunas parcelas han conseguido rendimientos extremos de 9-10hl/ha.

La elaboración para tintos ha evolucionado, inicialmente, Fabien trabajaba con el 100% de raspón entero, actualmente, varía dependiendo de las condiciones de la añada, pero suele estar alrededor del 30%. Los tintos desde el 2015 no tienen prácticamente madera, prefiere utilizar globos de cristal (por recomendación de Arnaud Ente) y depósitos de cemento. Las dosis de sulfuroso siempre son mínimas.

Chenas le jugment dernier está elaborado en Chénas el cru más pequeño de Beaujolais, al norte de la region, con uva gamay de distintas parcelas plantadas sobre suelos arcillo-calcáreos que suman un total de 2,6ha. Los racimos no se despalillan y se puede iniciar la fermentación con levaduras autóctonas. La crianza dura hasta dos años dependiendo de la añada. Lejos de los clichés de Beaujolais, el Judgement es ambicioso con un estilo musculoso y taninos patinados.

Domaine J. Chamonard, Morgon

Domaine Joseph Chamonard es una pequeña propiedad situada en Corcelette a las afueras de Ville-Morgon en Beaujolais. Allí, Geneviève Chamonard y su marido, Jean-Claude Chanudet tienen 4,5 hectáreas repartidas en las mejores sub-zonas del Cru Morgon. También cuentan con algunas parcelas en Fleurie. Joseph Chamonard, quien falleció a principios de los años 90, fue discípulo de Jules Chauvet, el padre espiritual del movimiento natural al que también se acogieron elaboradores míticos de la región como Marcel Lapierre.

Chanudet, quien desde entonces se ocupa del viñedo y la elaboración, fue amigo de la infancia de Marcel Lapierre y también es un ávido defensor de las dosis mínimas de sulfuroso y de prescindir de cualquier tratamiento químico en el viñedo. El viñedo de Geneviève y Jean-Claude ronda los 80 años y como en la mayor parte de Morgon, el suelo está formado de granito descompuesto y pizarra en algunas secciones. La elaboración aquí es tradicional, es decir que la fermentación es semi-carbónica con raspón entero en grandes tinos de madera. Posteriormente el vino permanece de 9 a 10 meses en fudre. Chanudet favorece una maduración óptima de la fruta por lo que siempre aguanta hasta el último momento antes de vendimiar. Jean-Claude también es un fiel defensor de la longevidad de Beaujolais y en algunas añadas, guarda una parte del vino antes de sacarlo al mercado. Los resultados sorprenden y lo cierto es que los vinos evolucionan de maravilla.

Morgon proviene de distintas parcelas que suman un total de 4ha. Los viñedos de gamay fueron plantados hace mas de 60 años sobre suelos de granito y arcilla. Los racimos se encuban, una parte, enteros, y el resto, se despalilla y se estruja. Así se realiza una semi maceración carbónica para buscar un vino frutal y complejo que ermenta con levaduras autóctonas. Después el vino envejece durante 12 meses en barricas de roble francés.

Thibault Liger-Belair, Moulin-a-Vent La Roche

Durante sus estudios de enología, Thibault Liger-Belair, del homónimo domaine en Nuits-Saint-Georges, pasó una etapa en Beaujolais y siempre se sintió atraído por la diversidad de suelos, la antigüdad de sus viñedos y la versatilidad de la gamay. En 2009, unos años después de la fundación de su propio domaine, ante el asombro de muchos de sus vecinos, adquirió 11 hectáreas en Beaujolais, concretamente en Moulin-à-Vent. Esta denominación, que debe su nombre al icónico molino de viento erguido en su propiedad, cuenta con el promedio de edad del viñedo más elevado de la región.

Comenta Thibault que mientras recorría la denominación buscando viñedos, se encontró con un vigneron que desconocía la edad de su viñedo, solo le dijo que él tenía 80 años y que cuando era pequeño ya llamaban vieilles vignes a las cepas de  aquel viñedo. Otra de las particularidades de Moulin-à-Vent es que contiene cantidades importantes de magnesio, lo cual es ligeramente nocivo cuando se usa en exceso y que reduce la canopia y el tamaño de los racimos y bayas haciendo así los vinos más concentrados. De todos los Crus Beaujolais, Moulin-à-Vent se ha caracterizado históricamente por producir los vinos más oscuros y tánicos. En Moulin, Thibault utiliza un modelo borgoñón para reflejar las diferencias de un viñedo a otro.

Moulin-à-Vent La Roche proviene de una parcela de 2,25ha situada en la colina, a escasos 50 metros del icónico molino que le da nombre. Las viñas de gamay fueron plantadas entre 1920 y 1945 sobre suelos de granito y arena rosa y blanca que tienen unos 30cm de profundidad. Las uvas se recogen manualmente y la fermentación se realiza en depósitos de hormigón y en barricas creadas especialmente para ese vino, de las cuales, un 20% son nuevas.

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