Las cálidas temperaturas que nos están acompañando estas últimas semanas, nos recuerdan la anticipada llegada del verano. El verano es, para muchos, sinónimo de alegría, festividad y disfrute, aunque para otros puede ser una época de mucho trabajo y estrés. Por ello, sea cual sea vuestra situación, en Las Recomendaciones del Mes de mayo nuestras sugerencias son refrescantes. Château de Pibarnon, Bodegas Ponce y Bodegas Septién presentan tres vinos rosados de gran calidad, elaborados con la pretensión de agradar a consumidores experimentados, pero tambien de convertir el calor en una buena excusa para descorchar uno de sus vinos.
Château De Pibarnon, Bandol Nuances Rosé
Esta bodega nace en 1970, cuando Catherine y Henri de Saint Victor compraron sus primeras parcelas en Pibarnon. Ellos apreciaron la belleza y el potencial de estos viñedos con vistas al mediterráneo y en pocos años consiguieron elaborar algunos de los mejores vinos de la denominación Bandol, en sus colinas más altas. Hoy en día, su hijo Eric, sigue guiando las vides que están plantadas sobre restanques construidos a mano (tradicionales muros de contención provenzales) que funcionan como las terrazas. Esto, hace posible que el viñedo que está situado a 300m sobre el nivel del mar, conviva en perfecta armonía con el ecosistema y el rico suelo que yace debajo.
El suelo de esta bodega es único, se le conoce como Trías y es muy rico en minerales. Está formado por una roca caliza capaz de retener agua hasta en los años más secos. Sumando este terroir, su microclima, resultante del anfiteatro natural donde crecen las vides y que les protege del viento, la perfecta altitud y una variedad de uva maravillosa, la Mourvèdre, obtenemos un resultado perfecto, como son los vinos de Château de Pibarnon.
Le Rosé Nuances de Château de Pibarnon nace a raíz de la intención de la bodega de crear un vino rosado de gran calidad, capacidad de guarda y mayor estructura que la que tienen otros rosados de Bandol. Para ello, lo elaboran con un 95% de Mourvèdre, la cual recogen de forma tardía y de una misma parcela, toda en la misma mañana, para que la fruta este lo más fresca posible. El vino, fermenta con levaduras autóctonas y después, se vinifica de dos formas diferentes, una parte en barricas de 30hl y la otra en fudres. Finalmente, el vino reposa en botella durante unos meses hasta que comienza su comercialización. El resultado, es refrescante, con una estructura amplia y gran longitud, una oda al mediterráneo perfecta para acompañar cualquier comida o aperitivo en este momento del año.
Bodegas Ponce, Las Cañadas
Pocos amantes del vino son los que no conocen el proyecto de Juan Antonio Ponce y su familia en la denominación de Manchuela. Esta denominación existe desde el año 2000 y después de que Juan Antonio estuviera trabajando junto a Telmo, entre otros, y en Francia durante los años 2005 y 2006, decide volver junto a su padre para iniciar su propio proyecto que ya se ha consolidado entre el público y la critica como uno de los más aclamados de la península ibérica. Ponce elabora vinos a partir de variedades locales bobal, moravia agria y albilla de viejos viñedos conducidos en vaso de su familia y otros que han ido adquiriendo por el camino. Los suelos son predominantemente de arcilla y caliza, aunque también hay suelos de granito y la altitud media de estos viñedos se encuentra entre los 600 y 800m sobre el nivel del mar.
Las Cañadas, es un vino rosado que elaboran utilizando un 90% de bobal y un 10% de albilla, provenientes de 1,5 ha de viñedo plantado hace más de 50 años en la parcela de Las Cañadas. El suelo de esta parcela es arcillo calcáreo y el clima continental, con marcada influencia mediterránea. La uva se vendimia manualmente y se prensa directamente sin clarificar ni filtrar. La fermentación se lleva a cabo utilizando levaduras indígenas y posteriormente, se cría durante 6 meses en fudres de 600l de roble francés usado.
En la añada 2021, se ha añadido un 15% de Moravia agría con la que pretenden aportar matices florales y herbáceos. Esta incorporación ha cambiado el perfil de este rosado, ahora más vinoso y con un paladar más suave.
Vientos Del Pueblo, Bodegas Septién
Bodegas Septién, es el proyecto del joven viticultor Andrés Septién en la ribera del Arlanza. Andrés comienza a hacer vino tras ejercer como inspector de vendimia en varias ocasiones en Arlanza, León y finalmente, en el Bierzo, donde terminó por enamorarse del mundo del vino. Arlanza es una zona que ha demostrado tener un potencial enorme, tanto por la altitud, como por los espectaculares viñedos y las variedades que podemos encontrar aquí. Esta bodega, aunque tuvo sus inicios en un garaje en Santo Domingo de Silos, actualmente se encuentra en Puentedura, en la Calle de La Alegría. Esta histórica calle llena de bodegas ha sido uno de los principales apoyos para Andrés estos años, junto con su familia.
El viñedo se trabaja en secano, siguiendo los principios de la biodinámica, ya que como ellos mismos dicen, uno de los pilares en los que se basa Bodegas Septién es el respeto al entorno y a la biodiversidad. Otro de los pilares sobre el que se sustenta este proyecto es la necesidad de reflejar la autenticidad de la zona, por ello, han ido recuperando parcelas, con la intención de mantener las variedades autóctonas que las ocupan.
Vientos del Pueblo es un clarete elaborado con la pretensión de mantener las características de los rosados que se llevan elaborando tantos años en el Arlanza, sin perder otras como la acidez. El nombre hace referencia al poema de Miguel Hernández y a este deseo de mantener la tradición vinícola que existe en los pueblos de la región. El vino se elabora con un 70% de variedades tintas (garnacha, tempranillo, Mencía) y un 30% de uva blanca (viura y albillo), que provienen de dos viñedos de 0,2 y 0,4 ha de mas de 75 años y situados a 900m sobre el nivel del mar. Después de prensar la uva, el vino fermenta en barricas de roble francés con levaduras autóctonas y después,se traslada a un deposito de acero inoxidable donde tiene una crianza de 5 meses sobre sus propias lías. El resultado es un vino con gran complejidad aromática y buena estructura.